Hace debutar a un Alien con la casaca nº 15.

- Para esto es necesario una espalda.

Busca algo así como una percha y en eso se da cuenta que lleva casi 3 meses sin cojer. [Bah sin coger, porque con j le bailan – en realidad]. Caso omiso y la arma. Pide el cambio. Lo manda al frente. La repercusión es nula. Como la gente. En franco misterio, sin embargo, la Realidad faena lo real: es la percusión, simple percusión. Melodía para sordos. De incluir en el Álbum el orden familiar, acordes, pero no sin acoples. No ortodoxo para la Ideología del Ruido – extraoficialmente es mantenido en su cargo. Aunque no se le hace firmar contrato. – [pero sí el homenaje en vida]. Y que debute en su partido despedida.

Haber sido el último en cantar rock en castellano.

Almaceneros Ricos Empobrecidos (AREAC), el club donde P hace sus primeras letras aunque sea con los pies. No tuvo gran repercusión en la Segunda Divisional de la R. dl S. [de la época en que intentaba abolir el off side] pero como una mueca de silencio no compungida – en nada – crecía. Polar frialdad en materia de manumisiones. A la hora de “fijar vértigos” el diario La Tribuna no era especializado – ni siquiera en -. Ni siquiera en nada. Se obligaba a narrar con preaviso las jugadas. A veces después las hacía mejor. Bastaría con echar un simple vistazo a los Anales, como para comprobar en el estado en el que hoy se encuentran. Un decir, a anos luz de todos. Aunque con sólo verlos un poco gesticular, uno ya se da cuenta. Dentro de la Zona Franca, ameritarían la erección de una estatua al Soldado Desconocido. Aunque guerra sea todo.

La locura es la falta de Dios. A la falta de la falta de Dios podemos llamarla sociosis. Slogan en una pared/ pegado/ en LA FUNDACIÓN DEL PADRE HURTADO.


[http://www.padrealbertohurtado.cl/]

Si te hacés mucho la paja te salen pelos en la palma de la mano, eso es bien sabido. Lo mismo, de tanto querer ser el hombre invisible la gente se queda ciega.
Y menos mal que el fracaso es la única Redención: había hecho un curso para dejar de narrar y ahora era coleccionista de frases, abrió la puerta de un mueble repleto de papeles y empezó a sacar “álbumes” llenos de frases cortadas y pegadas. Si no las encontraba las inventaba, incluso terminó inventándolas todas. “Es lo mismo, y es más fácil; son de nadie”. Si bien no los leí todos, eché apenas vistazos, para ver de qué iba la cosa, después para darme un panorama cronológico: los primeros doscientos no pasaban de ser un manual de introducción al mundo o al sentido común ilustrado o – segundo caso - el muestrario impávido de un delirio rígido, trivial, pero ya los últimos treinta eran como autorreferenciales, de otros treinta anteriores que ya lo eran, se habían vuelto incontrolables y cada vez más inevitables. Me los comencé a llevar, y empecé a pedirle cada uno que iba llenando, se empezó a volver un vicio, le empecé a pedir que los apurara, que llenara más, más rápido, que los fuera haciendo para mí, noté que en la obligada velocidad fue dejando de pegarlas, fue transcribiendo - ¿tendré que decir “escribiendo”? – las frases directamente sobre la superficie de papel de los álbumes, cada vez más, fui perdiendo todo interés por el mundo, como quedándome sordo, como perdiendo el oído, fui perdiendo interés en toda voz todo enunciado que viniera directamente del mundo por así decir, apuraba mi trabajo en la computadora para poder leer el nuevo álbum recibido, que ya llegaban cada cuatro o cinco días, más tarde a diario, fui dejando de trabajar, de bañarme, de comer armónicamente, me empecé a reducir, achicar, peor: achicharrar, no percibía ya mi olor, mezcla de tinta de birome papel y mierda, me pudría, apenas si podía alzar los álbumes, llevarlos hasta el escritorio, levantarlos, pasar de página, la urgencia y la imperiosidad del encargo, periodicidad, los fue convirtiendo, desgastando, los fue pudriendo en cierta manera igual que a mí, automáticamente incontrolables pero a la vez controlados como por la chabacanería, una especie de total pavada oblicua a todo, las maravillosas frases alguna vez escolarmente triviales anomalía ahora senilmente gastada, que me llevaron a sustituir el mundo y al final me perdieron, seguían parejamente el curso de mi destino, aunque de otra forma totalmente disímil habían vuelto a su imbecilidad originaria, pero yo que me fui descascarando primero, carcomiendo y apestándolo todo, ya piel y huesos, después nada: cenizas, un montoncito disperso de pelos caspa pedazos de telas, media suela de zapatos, los álbumes ahí. Aunque con cortes, en el otro canal dan una mejor.

Conchilla está como loco con su “tema único”. Se aúpa en el GB (Gordo Boludo) y soplan la arena.

En el espectáculo del mundo es meado. – Mi destino – say.

La Erudición-Tilinga. Lo acuna.

El lazo social no es un rebenque, Licenciado. Deje por un momento la ganadería de la pérdida. Dejad en paz a los dioses, también.
Todos me persiguen porque todos me aman porque soy un genio. O una reina que mendiga y se cree reina: ¿es rey? ¿Por qué golpeé al negro a la final? Porque sí, porque de no haberlo hecho, tengo para mí, y tengan la entera seguridad: no lo hubiera hecho. Es un hecho. Si fuera por la falta de amor de mis padres etc., no lo hubiera hecho ni a gancho. Juro.

20:48 – Cansar a la muerte es un buen recurso – 21:16 – No sabe qué lo masturba, si la mano invisible de A. Smith o la de los locos Adams. -

Mamadera bandera y barrera, dicen que el instante de decisión es imposible o no es instante. Tienen algo que decir: quién se cree que es.
Vamos a suponer que soy y que es eso. O sea. Que he vuelto a mi casa, como me cansa escribir: mi harem -: es caro lo barato -; y en un papel cuadriculado, con lápiz de dibujo ahora: eso: hago: haciendo: es: toy. Un muerto y un nº - que viene y va…
El relojero anacrónico tiene un atraso. Poemario: “Llena tu cabeza de Aldo Monje”. Artazo. La siguen mamando, Carlos.

Pocholo dice que “los pibes de barrio se están fago, citando la cultura”.

Dejó de dibujar y de mear sobre sus óleos; ahora mea firmas. Ni firma orinales y menos mea culpa, aunque la caga. Siempre la caga al final.

“El Misterio de la Interactividad sin Feedback” dice Pocholo en la fineza grosera de dos oídos dos. Da un cachetazo. Luego: te palmea (“redentores perseguidos sin motivo y a la vez dueños de la verdad, tanto futbolística como política”). Compromiso, control y reto. Nada de eso. - ¿Tienen algo que decir los que dicen quién me creo que soy? Quieren dejar de esfumarse, con el debido asesoramiento y medicación, puede ser hasta cómodo.

Pobreza Cómoda

Ingenuidad Cínica

Dos Personajes


La pantalla en blanco del Word. Mallarmé ante el corte de transmisión.

PAPPALADRO PPAPALARDO APPPALARDO PAPPALARD PAPPALARDA PAPPALARDOA PAPPALARDOE PAPPALARDOI PAPPALARDOO.

Un sueño: esclavizar al Lector.

Mariamartha no es un movimiento filosófico ni espiritual, no pretende promover el crecimiento espiritual ni humano a través de métodos dudosamente establecidos. No es un ejercicio de autoayuda ni un método mágico para alcanzar la felicidad. Mariamartha no pretende ser un abrigo bajo el que arropar creencias y dogmas de fe, ni siquiera un camino a seguir por nadie. Mariamartha no debe ser confundida en ningún caso con una corriente dogmática que pretende atraer adeptos ni seguidores, y en ningún caso debe ser entendida fuera de un riguroso contexto profesional. Mariamartha dice que era la mujer de Pocholo; dice que será la mujer de Papalardo.


- Yo pagaría por tener un lugar en el Paraíso del Tonto Solemne. O yo pago.

1. Curiosidad, interés por el mundo
2. Amor por el conocimiento y el aprendizaje
3. Pensamiento crítico, mentalidad abierta, capacidad de juicio
4. Creatividad, originalidad, inventiva, inteligencia práctica
5. Perspectiva
6. Valentía
7. Perseverancia y diligencia
8. Integridad, honestidad, autenticidad
9. Vitalidad y pasión por las cosas
10. Amor, apego, capacidad de amar y ser amado
11. Simpatía, amabilidad, generosidad
12. Inteligencia emocional, personal y social
13. Ciudadanía, civismo, lealtad, trabajo en equipo
14. Sentido de la justicia, equidad
15. Liderazgo
16. Capacidad de perdonar, misericordia
17. Modestia, humildad
18. Prudencia, discreción, cautela
19. Auto-control, auto-regulación
20. Apreciación de la belleza y la excelencia, capacidad de asombro
21. Gratitud
22. Esperanza, optimismo, proyección hacia el futuro.
23. Sentido del humor
24. Espiritualidad, fe, sentido religioso
25. Se muere (telón).

No se atreve a llamarle poemas / A sus gansadas / Y ovinos / Ni a su vaca / A los nudos de sus dedos / Con su traquea / Con los que traquetea / El teclado sin pensar / En desnudarse
Por eso vende bombachas / Y la familia le acaricia la cabeza / Le pide un hijo / Para que tenga de hijo / Él también uno / Y así lo dejan ser / Eso que no quiere llamarse / Poeta / Bah, / Para mí es un imbécil. Cada cual tiene su opinión. Creo que también se la come (pero sólo en sueños: ojo). Quería ser intérprete de mis deseos Se creía que jugaba de local Condenado a Siberia. Y ahora al cyber. O como escribe el corrector del Word
Al caber. ¿Onde?

Pobre, es idiota / Se cree un señorito / Toma su escopeta y monta / Escribe que monta / Monta que escribe / De vuelta a su casa / Se olvidó de hacerse el jipi / De sus amiguitos de la escuela / Conduciendo el autito de papá / O de Lacan / El Kaiser Carabela / O Calavera / De Perón / Ahora da la cara / Y se filma / Monta un hotel en su isla Promisoria / O prometida / Llena el Word
De prejuicios / - Desplazados- / Nimiedades / -Condensadas- / Y las procesa en el Translator Pro / - Un chico Pro - O modesto / En el Google / Cada estupidez un “texto” / Y clama por el don de la venganza / Donde la venganza no le viene / Técnico Superior en PDF / Pede y cree / Que puede
Pddd… / Me hizo un muñequito / Y lo acogota / Le hace acupuntura / Occidental y cristiana / Lee un manual con Hegel dentro / Y se pregunta / ¿Por qué llegué hasta acá / Si sólo fue un sueño
En el que te chupaba desesperado la pija? / Pobre putito. Yo no sentí nada. Yo estaba en otro lado. Soy de acá.

- El problema no es que me entiendan o que no me entiendan, ni uno ni otro; eso podía ser antes. Es conmigo el asunto: entenderme yo o no. Sin dudas.

El cuerpo helado, y ¿dónde?: ay: una serpentina con clarividencia axial sin un ápice de destino sebáceo.
- Se va.
Vuelve (acto continuo).
Dice que la mano no le responde a los pensamientos. Está en otra y nada le importa la contingencia de una única subjetividad, por más que los una un también único – o ¿úñico?- cerebro y una idem única musculatura. Otros son los pormenores de esa mano: dice que nada le interesa que no sea literat. O: toqueteos. “A mí me gustaría hablar de ese culito blando y pequeño – extraordinario también por entrañable, perdido en él hace seis años, hay algo (o todo) de mío - que manoseé el jueves último, creo recordar”. Tenía un sueño supino y encima su dueña ya es un sueño en sí misma (yegua, pesadilla), por lo que me olvidé de casi todo lo que pasó en el motel de calle Entre Ríos 481, uno de nuestros excepcionales niditos de amor, si es que no existe – dice.

Yo fascilista.

La lengua de Bruno Gelber no – no tanto -, pero los dedos sí, le son fascistas.

Milito: en el arte y en la vida. Palermo no.

Espontaneísmos del metalenguaje (tampoco-¿*

Eva (Braun) &/0 Pocho (García). Y me hago 8 líneas de fuga tiempo completo.

Concha-Pantalla.

= Ob. Volador Identificado.

Y no olvides a Balá, Baley: la política nunca será comprometida. Nunca.

Que me traten de boludo es un acto de justicia in.

Para exaltar al victimario, ni C.Q.C ni cristianismo sobran.

Rockambol-nene.

Rocambolesca, mi pesadilla común. Pero común eh.

La lengua de Bruno Gelber no – no tanto -, pero los dedos sí, le son fascistas.

Hubiera sido una increíble negligente de no imitar ese caño. N.N.

Me apasiona el chiste viejo más que el malo, creo corregirme. Ser chiste es un viejo.
Mogólico interior. Sin Novela.

El bovarismo deleciano. Futuro análisis.

Por favor plágiense. Un célibe que se adelantaba a las condiciones colectivas de enunciación. Orsay.

Con alambre de puta sur SIDA. Tiene la argolla. Si un poeta tortura en silencio ¿para Sócrates que le queda?

Fascistas poetas y trolos somos todos. Genio uno por cuadra.

El poeta maldito no se corta la sangre; se baña con la vena de los caídos.

El poeta maldito no se baña. Se corta de los caídos. La sangre con las venas.

Wabi-on.

6.000.000.000 = snobs.

Ni en pedo opino lo que se me canta. Obvio es todo OVI, si se me canta, sólo q´se me cante. Y cuanto antes. (Perón)

Nazía una Editorial…anticartonegra.

(Desfetichizar a [la] Batichica)

Y por lo tanto el puto es ortO.

Porque todo es Otro O…

Que le gusta cuando huele a la pija de otro.

Es un Provocador-que-la-Probó.

Probemos a los stalinistas, probemos a los resentidos, probemos a los marxistas, probemos a los jóvenes de letras, probemos a diestra y siniestra.

El cine tampoco.

El estalinismo no es un argumento.

La vida está del lado del estalinismo, que es otra cosa.

Conoció a Gastón Pauls, lo insultó (es un enano… quién no) y luego siguió lo más pancho premeditando actos de impene Provocación.

Cacerola en mano leía los clásicos, y mataría por matar a un negro.

La vida es un chiste pero no cuando se me para la pija cuando declamo “Llano, es ma, ji, co-el-mundo, te han dejao”: 21 x 6.

Papalardo, ya no te soportó más. Que te cuente orto.

Y que conste que seguiré insistiendo: siempre la televisión siguió siendo preferible a la literatura. Aj!copronunciarla!

La facultad es una fiesta y viceversa: dos únicas formas del posible aburrimiento en lo que queda de este Monde.

Cuando llegue la Muerte de Comentarista Anónimo a manos de una nueva policial tecnología puesta a los pies de las masas de comentaristas nónimos, no prevista por el precarismo de Foucault, habrá acabado una época, deberemos buscar otro Homer o nuevo.

El humo hizo un hogar: iso holgar (siempre seré un cuentachistes): Artaud es Platón y Platón es Artaud (¡qué plato decía mi agüela estoy harto!) [siempre…]: intelectuales seráficos leyendo Le Monde. Bourdieulines al FIN…

Cansado de la autoteoría, de la experimentación de sí, autopenetración y pornología, apaga a Rial, apaga a los anarkoperonistas, apaga de mí ese cáliz.

... es un escritor pésimo. Forzosamente, no lo hace eso un escritor imprescindible para mí. Las razones ni son razones y mejor sería que fueran otras. Cuando militamos brevemente en una agrupación de marxismo mexicano – apenas dejábamos la adolescencia por otra – deploramos el oportunismo político. Que nos haya quedado a ambos el inoportunismo, como lastre crónico y estetizado – peor – tampoco es razón. Después nos vimos poco. No basta verse: basto es el mundo pero más basto es mi corazón. A la inoportunidad su estilo suma el atraso, o que su ingenuidad acuerde con la aberración, no le ofrece salida. Que sea ubicuo, improbable es. Su destreza para la bilocación, ha arrojado testimonios de terceros discordes. Lo hemos visto volar, comerse higos con asnos engullidos dentro; reír. Pagamos la fianza: salió de la cárcel. Perseveró, sabe huir, aunque mal. Es de esos escritores que no lo son, histéricos gélidos que saben desaparecer y aparecerte por la espalda, locos. Una cosa es escribir en peligro, otra ser, otra: ser peligroso. El anacronismo in, un muerto. Y un número que viene y va. Afuerado por el sistema, que ama y ningunea, ama y ningunea, equivoca el momento de ser un genio. Todo lo contrario de lo que concierne a la probable cita de Epicuro, no vive oculto: es una peatonal de intimidad, timos, intimidación, temor. Su escritura es de renuncia; su alma lo vende. Me tiene sin cuidado. Cosa de él. Yo me sé y cuidar sólo. No sé, de hecho, otra cosa. Demasiado legible, pasa desapercibido. Todo de secreto, como un. Fue el inventor – eso es cierto, no deja de ser meritorio – de la primera montaña de hipopótamo, o por lo menos, la primera en hacerse – o ser – visible. No quiso su premio y desde luego, no tuvo su premio. Que vuele es manierismo fuera borda, precisa de cierta lubricación. Yo sí lo vi. Al margen de todo esto, me confieso: soy yo el responsable de la inundación lamentable de la ciudad capital de nuestra provincia. No culpen a ningún miserable millonario famoso.

NO SOMOS SÓLO UNA EMPRESA DE DEMOLICIONES

TRABAJAMOS POR USTED

Cierto, en la actualidad, regenteaba un grupo musical - la más maravillosa m... -: Los Ángeles de Schmitt. Como los de Swedenborg - y al contrario -, basta pensar en ellos: para que existan.